Existe una idea errónea ampliamente distribuida en nuestra sociedad de que los Trastornos de la conducta alimentaria son un estilo de vida o una “moda”. Nada más lejos de la realidad. Este tipo de trastornos son enfermedades graves caracterizadas por alteraciones severas en la conducta, pensamientos y emociones relacionados con los hábitos alimentarios con importantes repercusiones personales, familiares y sociales.
Se asocian con cierta frecuencia a enfermedades orgánicas (cardiacas, renales…) y, en los casos más graves, a la muerte.
Las características comunes de este tipo de trastornos son la preocupación excesiva por la comida, el peso corporal y la silueta.
Dentro de este tipo de patologías mentales destacan:
Es común la coexistencia de cuadros depresivos, trastornos de ansiedad, trastornos de personalidad, el trastorno por uso de tóxicos o la conducta suicida entre los pacientes con un trastorno alimentario.
La causa exacta de esta los trastornos es desconocida, aunque los investigadores creen que una interacción de factores genéticos, biológicos, conductuales, psicológicos y sociales están relacionados en su etiología.
Este tipo de trastornos es más frecuente en mujeres, desencadenándose principalmente en la adolescencia y en las primeras décadas de la adultez. Sin embargo, también se han observado casos en la infancia y vejez.
El diagnóstico y tratamiento de este tipo de pacientes lo realiza un equipo multidisciplinar formado habitualmente por un psiquiatra, un psicólogo, un endocrinólogo y un nutricionista. El apoyo de enfermería suele ser crucial en estos casos. Es necesario llevar a cabo una valoración exhaustiva tanto psicopatológica como física, siendo habitual la realización de diversas pruebas complementarias (analíticas de sangre y orina, electrocardiograma…).
A nivel terapéutico, hay que realizar un abordaje precoz a distintos niveles:
Psicoterapia individual, grupal y/o familiar: incluyendo enfoques cognitivos conductuales que ayuden al paciente a identificar y cambiar los pensamientos negativos y disruptivos relacionados con la conducta alimentaria.
Psicofarmacoterapia: los antidepresivos, neurolépticos o estabilizadores del ánimo pueden ayudar en este tipo de patologías.
Observación de patologías orgánicas que comúnmente se asocian a este tipo de trastornos.
Asesoramiento nutricional: información y apoyo de hábitos alimenticios sanos por parte de nutricionistas, enfermeros o terapeutas.
Un tratamiento a largo plazo con buena adherencia por parte del paciente es fundamental para alcanzar la recuperación en este tipo de trastornos mentales.
¿QUIERE SABER MÁS SOBRE LOS TRASTORNOS DE LA CONDUCTA ALIMENTARIA?
Si desea conocer más profundamente sobre los Trastornos Alimentarios, le recomendamos la lectura del siguiente folleto divulgativo:
Aquí encontrará la descripción de los diversos trastornos de la alimentación, informando de sus causas, manifestaciones clínicas, diagnósticos y tratamientos.
¿CÓMO RESERVAR CITA PARA LA CONSULTA DEL DR. ÁLVARO MOLEÓN?
Para RESERVAR CITA llama por teléfono al 622290407 o reserve a través de Doctoralia.
Álvaro Moleón Ruiz – Doctoralia.es